Despertábamos el dia en BCN con frio pero con una
previsión de muy buen tiempo durante la carrera. A las 05:00 sonó el
despertador, como en todas las grandes ocasiones hay que madrugar para hacerlas.
Ya me había dejado todo preparado el dia anterior, solo tenía que despertarme,
almorzar y vestirme para ir a coger el tren a las 06:15. De desayuno, el de las
grandes ocasiones… 2 tostadas de mantequilla y mermelada y otra de nocilla.
Además, un par de yogures naturales con frutos secos. Con todo esto debería
tener gasolina hasta el km30 aproximadamente.
Me acabé de preparar la mochila con toda la ropa
de recambio y con la ropa de “por si acaso” que me llevaría a la carrera. Lo
malo de estas pruebas donde te desplazas es que cuando sales de casa lo que no
lleves encima dalo por perdido… si te hace falta algo más no podrás cogerlo.
Salí de la portería, aun totalmente de noche, solo
había una persona más en la calle, un chico que llevaba mi misma dirección, la
estación del tren. Al llegar me preguntó si iba a hacer la maratón y le
contesté que sí. Me deseo suerte y esperamos en el andén que llegara el tren.
Justo cuando llegaba el tren vi a otro chico con su novia. Él iba vestido de
corredor, otro más del barrio que venía a la maratón… es curioso ver como poco
a poco vas sumando gente a tu misma prueba.
Seguí el camino, nervioso, hasta plaza España y
llegué a las 07.00h, antes de lo previsto. Hacía mucho frio y yo solo pensaba
en cómo iba a poder quitarme la chaqueta y ponerme para correr si estaba
congelado con una chaqueta de plumas… en fin, ya se vería.
Había quedado con David a las 08.00 en un punto en
concreto al lado del guardarropa y un poco antes con Mikel en el mismo sitio.
De momento estaba solo, viendo el ambiente que poco a poco se iba formando y
esperando a que llegara la hora para prepararme. Me reuní con Mikel pero a
David no lo encontré. Camine al cajón a las 8.15 y ya empecé a preparar el
reloj, la música y la cabeza para la gran cita.
Es muy emocionante cuando suena el disparo y sabes
que la elite ya está en marcha, te queda muy poco para salir y eso pone muy
nervioso… 7 min después ya estamos corriendo en la plaza España y encaramos el
carrer de Sants. Sobretodo la consigna es fácil, regular el ritmo elegido
5:15-5:20. Se podía correr fácil, había mucha gente pero las calles eran
anchas. Llegué a la diagonal frenándome mucho y regulando. Lo penoso era ver más
de 50 tíos meando justo en los pinos que hay delante del Camp Nou, una vergüenza
ver eso en una prueba así. Mas cuando la organización ha puesto lavabos rápidos
en todo el recorrido… por cierto un 10 para la organización por cosas como esa.
(Fotos de www.elperidico.com)
Seguí a ritmo, aprovechando las bajadas para aumentar un poco la velocidad y casi sin darme cuenta pasé por la Sagrada Familia y ya estaba en la Meridiana. Pasé la media maratón en 1:51h, 1minuto y medio más rápido de lo que pensaba… pero iba muy bien. En ese momento me llamo mi mujer, que me estaba siguiendo por la APP, para ver cómo iba. Seguí adelante pensando solo en que en el km24 vería a unos amigos y asi, engañando a la mente poco a poco iban cayendo más kilómetros. Pena porque al final no nos vimos y eso te hace que fijes el objetivo en otro punto, tienes que mantener la mente activa. En el km26 mientras iba corriendo me llamo la atención un chico que me animaba con especial dedicación, era Xavi, un excompañero de trabajo y un gran amigo runner. Eso me dio fuerzas y más aun sabiendo que en el 30 lo volvería a ver. Pasé 4km simplemente esperando a verle de nuevo y saludarlo. Me dijo que iba muy bien, que estaba fuerte y que siguiera así. Encaré el paseo marítimo y de cara a las torre Mapfre. Aun vería a unos amigos antes de llegar, Marta y Marius que me reconocieron en medio de la gente, que bueno es encontrar gente que te conoce y anima…
Llegar al 35 ya no fue tan divertido… el ritmo no
fue el mismo y ya costaba mantenerlo. Aun asi, vi que no perdía tanto tiempo y
que aun iba fácil por debajo de los 5:40. Tenia colchón para atacar el 3:45h de
tiempo final pero me quedaban 7km’s. Llegando al corte ingles pensé que era
cuesta abajo pero cuando vas tan cansado no importa, la cuesta abajo no ayuda
tanto como esperas. En el 39 me adelantó la liebre de 3:45 y valore como estaba
para intentar seguirlo o cambiar el objetivo. Pensé en asegurar el 3:50h porque
seguir a la liebre era complicado, por decirlo fino.
Pasé por el km40, empezando el paralelo. Ya se
veía el arco rojo al final de la calle, ese era el km42 y no podíamos parar,
aun no… Iba a buen ritmo, sobre 5:40 aprox. pero casi en el km41 una rampa en
el isquio derecho me dejo seco, sin poder correr. Aquí hay que pensar rápido,
todo lo rápido que se puede después de 41km. Si no haces lo correcto puedes
perder el objetivo, un kilómetro puede ser muy largo si no vas fino. Decisión:
parar, estirar, beber y salir cojeando… Poco a poco pude trotar cada vez más y
al final en unos pocos metros pude volver al ritmo. Total tiempo perdido 1 min
a lo sumo.
Llamo a mi mujer, le digo que estoy casi en el 42
y que llego a meta. Me dice que está en una fuente subida, en la parte derecha
de la entrada, que la veré seguro. Que ilusión verla cuando llevas tanto rato
dándolo todo, te llena de energía, esa que necesitas para los últimos 100m.
Giro en plaza España, ya veo el crono, veo a mi mujer que me saluda muy
eufóricamente, tanto que la chaqueta de plumas que llevaba se cayó en la fuente
y luego estaba chorreando y tanto que el resto de gente alrededor también me
anima, apreto los dientes y a fondo… cruzo la meta y acabo contento y feliz,
3:50:38. Un tiempo más que respetable para ser la primera maratón y dentro del
objetivo, que más puedes pedir.
No soy de asfalto, eso lo sabéis bien, pero la
maratón ha tenido algo que me ha cautivado. Es una prueba que te pone en tu
sitio, sin prisas ni pausas, pero que te embruja para que se te olvide todo y
quieras más, quizás en el 17????? Ya veremos!
Alimentación en la prueba: lo llevaba todo medido,
3 geles normales, 1 especial con taurina y BCAA’s y por si acaso uno de
emergencia con cafeína, finalmente un sobre de potasio y magnesio que va de
fábula para recuperar sales. En total 5 geles para toda la prueba y uno de
sales. La idea era tomar uno cada 8km’s aproximadamente y en la media maratón
las sales. Solo en caso de emergencia tomaría el quinto gel.
Me tome uno en el km9, otro en el 18 y el tercero
en el 26. Siempre unos metros antes del avituallamiento, para poder tomar agua
un poco después de tomarlo. En el 31 me tome el cuarto gel y en el 35 el de
emergencia. No quería quedarme tirado en el último momento y decidí tomar todo
lo que llevaba. No fue una mala idea porque me fue bien, me noté entero,
cansado, pero entero toda la prueba.
Hidratación: La organización lo ha trabajado
muchísimo, teníamos un avituallamiento cada 2,5km’s lo cual era perfecto porque
si necesitabas agua en muy poco rato ahí estabas. Yo me salté los 2 primeros
avituallamientos, 5 y 7,5 y cogí agua en el 10 para pasar el gel del km9. A
partir de ahí en cada avituallamiento cogí agua, 3 tragos y tire el resto. No hacía
falta guardar la botella porque en poco más de 15 min tenías otro
avituallamiento. Muy importante mantenerse hidratado para que todo funcionara,
yo creo que más o menos lo conseguí.
Muro: como tal no lo he conocido, no fue algo que me llego de repente sino que por el mismo cansancio poco a poco me fue costando mas correr. Algo normal en carreras de fondo porque las piernas dan lo que dan... pero me noté entero toda la carrera, supongo que haber hecho carreras mucho mas largas me dejo preparado para esa fase. Tambien los 5 geles ayudarian...
Parte I: La preparacion
Parte II: Ultimando detalles
Muro: como tal no lo he conocido, no fue algo que me llego de repente sino que por el mismo cansancio poco a poco me fue costando mas correr. Algo normal en carreras de fondo porque las piernas dan lo que dan... pero me noté entero toda la carrera, supongo que haber hecho carreras mucho mas largas me dejo preparado para esa fase. Tambien los 5 geles ayudarian...
Parte I: La preparacion
Parte II: Ultimando detalles
